21.4.08

Yellow Chair

Intercambiaban archivos mediante la red inalámbrica, sin embargo a lo largo de un año, las puertas y las ventanas cerradas no le permitieron conocer las caras de sus vecinos. Fue entonces cuando, con ayuda de un ruteador, un letrero y una silla amarilla, se decidió a convertir (de nuevo) la banqueta en un espacio público.

Vale la pena tomarse unos minutos para revisar los pormenores del proyecto y ponerse a pensar en nuevas maneras de asistir a la calle de un modo que vaya más allá que la circulación. Aunque sólo haya sido por unos días, esta estudiante de arte nos pone el ejemplo sobre cómo con pequeñas estrategias podemos invitar a la gente a salir de su hermetismo y encontrarse con una banqueta, cuadra o ciudad pobladas de personas, tal vez desconocidas, que aliadas a nosotros le dan vida a la ciudad.

No dejen de visitar el sitio de 'yellow chair stories', ni de checar el video; espero sirvan de inspiración.

1 comentario:

Ana Paula dijo...

¿Con que esto era lo que te tenías guardado? Está interesante el proyecto, que bueno que lo das a conocer por aquí, y pues, chequemos que se puede hacer por estos rumbos.
Te amo